De quoi s´agit-il

¿Por qué estamos como estamos?

Toda vez que aparecen en las noticias casos de violaciones, robos por moto chorros, o tomas de propiedades privadas, planeros que viven a costa del estado, es decir a costa de quien paga impuestos, nuestra reacción es la misma. Nos preguntamos por qué el estado permite las tomas y después, si no media un escándalo social de proporciones, tampoco produce el desalojo. En los casos de moto chorros, no son perseguidos y, en los pocos casos que son aprehendidos por la policía, casi inmediatamente están en libertad. En el caso que, el moto chorro, intruso o violador es un menor, está de regreso en su casa antes que la víctima que deberá dedicar horas o días de su tiempo a trámites policiales o judiciales durante un tiempo que sustraerá a su trabajo, estudio o asuntos personales a los que tiene derecho. Respecto de los planes y programas sociales nos preguntamos por qué duran años, tres generaciones de personas que no supieron qué es trabajar y/o estudiar. No solo se reducen sino que, aumentan.

La estrategia general de todo gobierno peronista, por sistema, es que los problemas son causados por la oposición, el FMI, el campo, los militares o, en algunos casos, el resto del mundo que nos envidia por tener menor desocupación que Alemania. Pero, aun cierto, no es el fondo de la cuestión. El espermatozoide unido ya al ovulo, el cigoto-peronismo, transformó la actividad política practicada por hombres y mujeres de diferentes ideas pero con el único y coincidente propósito de la felicidad colectiva; en un monstruo, al que deberíamos asesinar: la política como salida laboral a la que pretenden ingresar y lo hacen aquellos que fracasaron en la vida privada y que, sin un solo logro para sí y familia pretenden ser de ayuda para ayudar a otros. Nadie vio jamás a un político, pasar la noche sin dormir por la muerte por hambre de un niño, las víctimas de una inundación o la quema de un millón de hectáreas en Corrientes. La incompetencia de los políticos no debiera sorprender. Si no logró nada para sí en su vida fuera de la política, porque sabría cómo lograr la felicidad colectiva. Pero, la función pública le dará la oportunidad de que, sin preparación y subsecuente incompetencia, hacer de él, familia y amigos, personas acaudaladas.

Para hacer un análisis que nos aproxime a la verdad, lo primero es aceptar que, salvo excepciones, la clase política solo se ocupa de sus propios privilegios. En provincias con mortalidad infantil por desnutrición, el gobernador tiene un jet Ejecutivo para sus desplazamientos… incluyendo a familiares y amigos.

Analicemos los casos enunciados, como ejemplo del pensamiento y acción de lo que estos personajes significa gobernar:

Tomas de propiedades públicas o privadas. El estado tiene sobre sus espaldas facilitar el acceso a la vivienda y argentina tiene un enorme déficit habitacional. Ante una toma o usurpación, el estado, solo con no hacer nada, logra dos cosas fundamentales, por un lado se auto soluciona la demanda de ese número de ocupas de una vivienda ya que a partir de ese momento lo consideraran propio y, logra la adhesión y votos de los ocupantes ilegales. Conclusión. ¿Por qué razón del pensamiento normal y no corrupto, un gobierno peronista produciría un desalojo? Para el peronismo, las tomas consentidas, además de lo antes dicho, es su manera de realizar la “distribución de la tierra”, una especie de introducción a la revolución agraria.

Los moto chorros y otras modalidades. El estado tiene la obligación de brindar seguridad a la población y generar las condiciones para la generación de empleo. Si usted toca a la puerta de un moto chorro u de otra es especialidad y este no se encuentra en casa, su esposa o quien lo atienda le dirá que’’ salió a trabajar’’. En el idioma de ellos, lo que hacen es, trabajo. Con el sistema peronista de no perseguirlos y de dejarlos libre de inmediato a los pocos que son aprehendidos, el estado logra, sin hacer nada, que se desarrollen estos pseudos empleos con la ventaja nada despreciable que, el moto chorro, estará satisfecho y de ninguna manera reclamara un puesto de trabajo en blanco al que debería asistir muy temprano y, trabajar. Para el Estado peronista, la actividad de moto chorro y otras modalidades es una manera de distribuir riqueza por medios alternativos aunque ilegales. Pero todos sabemos la prioridad que tiene en el peronismo el respeto a la constitución y las leyes. Ante esta situación vale preguntarse para entender. ¿Por qué razonamiento, el peronismo perseguiría a los moto chorros si, para ellos, los políticos, están gobernando gracias a ellos? ¿Qué pasaría si todos los ocupas y moto chorros dejaran la actividad y reclaman trabajo y vivienda? El estado argentino, mejor, sus gobernantes, ¿pueden acometer una gestión que solucione estos dos temas? Por qué razón el peronismo despediría al personal sobrante de la administración pública municipal, provincia y nacional si, para pagar los sueldos pueden pedir prestado, emitir y/o generar inflación a gusto o saquear al campo para ajustar la economía.

En honor a la verdad, no genera una gran expectativa la posibilidad del regreso de Cambiemos, quienes, ya me hicieron perder hasta hoy, 6 años de mi vida. Cuatro de gobierno propio y 2 más de Fernández, que también son obra suya. Ese relato, esa historia de los políticos de Cambiemos que ahora pregonan, esta vez aprendimos, es lo mismo pero, con otras palabras, con el volvimos mejores.

Realmente ignoro cuál puede ser la respuesta a la pregunta cuál sería un sistema de gobierno competente a nuestros problemas. La democracia no lo es. Por lo menos a esta altura de nuestra madurez cívica. Este sistema adecuado a nuestras necesidades, si lo encontráramos, debe incluir en la ecuación el término Argentinismo. Es el dato distorsionador para todo proyecto nacional.

Pedro Enrique Borgoglio Boetti